En esta entrada voy a mostrar cómo fabricarnos nuestro propio Breath Builder con sencillos materiales que encontraréis sin mucho gasto ni esfuerzo.
– Dos trozos de manguera de goma, si es posible transparente, que ajusten en la boquilla del bote de 15 cm de longitud. Uno de ellos debe ajustarse por el exterior del «pitorro» y otro por el interior. Es decir, uno más grueso y otro más fino.
Cogiendo el bote de plástico, vamos a determinar la longitud del pitorro que sobresale. Esta dependerá del diámetro de la goma fina que acabamos de cortar. Debéis seccionarlo a la altura que esta ajuste bien.
Esto es extremadamente simple: solo hay que introducir la pelota dentro del bote, cerrar la tapa bien, y meter la manguera por la boquilla. Si no habéis cogido unas gomas de un tamaño muy exagerado (tanto grande como pequeña), como las boquillas de estos botes se van ensanchando, deberán ajustar perfectamente. Si tenéis problemas siempre un kit de cualquier celo, esparadrapo o teflón os puede ayudar, ¡aunque lo ideal sería que no llegaseis a este extremo..!
Enhorabuena, ahora sólo tenéis que disfrutar de Breath Builder casero, el cual podéis decorar con lo que os apetezca y poneros a practicar como locos…
Que la capacidad respiratoria se engrandezca y la música se beneficie 🙂